martes, setiembre 11, 2007

Había escrito esto para el diario, pero mi jefe prefirió otro artículo.

Conspiraciones en Estados Unidos

David Schippers, abogado y fiscal de EE UU, recibió la visita de dos agentes del FBI, seis semanas antes del atentado a las Torres Gemelas de Nueva York. Durante esta visita, los agentes del FBI le informaron, con fecha y objetivo, los ataques de los que sería víctima Nueva York el 11 de setiembre del 2001.
Después de los ataques, Schippers -quien habría saltado a la fama como el acusador principal en el caso Monica Lewinsky- denunció que los agentes del FBI acudieron a él porque la oficina central había bloqueado las investigaciones que realizaban. Además, el FBI había amenazado con procesarles si hacían públicas tales informaciones.
Schippers relató que durante las seis semanas precedentes al 11 de setiembre trató, infructuosamente, de comunicarse con el entonces secretario de justicia, John Ashcroft, pero que éste rechazó repetidamente sus llamadas.
Asimismo, el periodista norteamericano William Norman Grigg, apoyando la versión de Schippers, publicó en un artículo en el periódico The New American que, según tres agentes del FBI que había entrevistado, “la información proporcionada a Schippers se conocía en todo el FBI antes del 11 de septiembre”.
Hechos como éstos han llevado a que en la imaginación de muchas personas se conjeturen hipótesis sobre “conspiraciones” alrededor de los atentados ocurridos contra las Torres Gemelas de Nueva York.
Estas hipótesis afirman que las investigaciones llevadas a cabo por EE UU tendrían numerosos puntos oscuros y que las autoridades del país del norte pretenderían ocultar o encubrir una conspiración a gran escala, motivada por llevar a cabo las acciones bélicas que pretendía.
Sin embargo, las ideas alrededor de estas conspiraciones parecen agotarse con el pasar de los años, ocultas bajo una sola versión oficial, manejada desde el mismo EE UU, país acostumbrado -desde el asesinato de John F. Kennedy- de ser acusado de conspirar contra sí mismo.